Cada vez viajamos más y más lejos,
y generamos un impacto en las especies y en la población local. Expertos de
todo el mundo se comprometen en Botsuana a liderar, innovar, financiar y sobre
todo educar en turismo sostenible. Cuando se planifica y gestiona con
principios de sostenibilidad el sector turístico ha demostrado que puede
generar un crecimiento inclusivo mediante la creación de empleo, promover la
integración social, ayudar a proteger el patrimonio ambiental y cultural,
conservar la biodiversidad y generar medio de vida sostenible. Sin embargo el
sector está experimentando un gran crecimiento, y eso requiere un esfuerzo por
parte de todos los interesados para replicar y ampliar la adopción de prácticas
de producción y consumo sostenible en empresas y destinos de todo el mundo.
Entonces: ¿cuál es el turismo que queremos y cómo lo conseguimos? Estos son los
interrogantes que han tratado de responder el centenar largo de expertos que se
han reunido esta semana en Kasane, enclave privilegiado del norte de Botsuana y
punto de entrada de un gran número de safaris y otras actividades relacionadas
con la naturaleza. La misión ha sido intentar definir las mejores maneras de
lograr que el sector se convierta, definitivamente, en abanderado de la mejora
del planeta y que el respeto por el medioambiente y la responsabilidad de los
viajeros con el entorno no sea cosa de unos pocos, sino la forma de pensar y
actuar de la mayoría.
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